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Campanazo de alerta
- Actualizado: 3 febrero, 2016
Cara y Sello
Pasa en cualquier campo profesional o en el mundo de los negocios: una mejor oferta siempre tendrá aceptación. Es algo lógico y en lo deportivo sí que hay ejemplos, es sino mirar el fútbol y su movimiento en la bolsa de jugadores.
Por estos días la gran preocupación en el deporte local se centra en la fuga de talentos. Desde el mismo momento que se estaban desarrollando los pasados Juegos Nacionales empezaron las tentadoras ofertas: sueldos, vivienda, estudio, alimentación…¿Quién se resiste?
Si eso mejora las condiciones económicas de un atleta, le ayuda a crecer y avanzar en su proceso competitivo, bienvenido sea, sin dejar de lado el sentido de pertenencia por un departamento que también ha invertido y apoyado, pero eso solo hará parte de una reflexión a la hora de tomar la mejor decisión. Ahora, tampoco se pueden caer en las falsas promesas, ni los ‘pajaritos que se pintan en el aire’.
Es indudable el crecimiento deportivo de Risaralda y así quedó demostrado en los Juegos Nacionales 2015 con un sobresaliente sexto lugar y una cifra histórica de medallas: 29 oros, 33 platas y 40 bronces.
Pero todo no puede quedar ahí. A la par del crecimiento deportivo, deben mejorar las condiciones, más que cuestionar o mirar quién se está llevando los deportistas.
Esa será el reto de la actual administración departamental, estructurar un plan novedoso, llamativo, respaldado por el programa Deportista Apoyado y hacer sentir la camiseta de Risaralda frente a los demás departamentos. Ojalá se pudiera vincular la empresa privada. Este es un campanazo de alerta y no se puede actuar tarde.