Deporte Risaraldense

Abran bien el ojo

El sábado anterior, al igual que muchos oyentes, me “tomé un Café Caracol” con el doctor Hernán Peláez, programa radial en el que el jugador colombiano Jackson Ibargüen contó su historia, que fue toda una odisea producto de los engaños y de las promesas de falsos empresarios de fútbol.

Contó también cómo salvó a un amigo suyo de Brasil de caer en “las garras” de un tipo que se hace pasar por el gerente deportivo del Nacional Víctor Marulanda y cómo su caso terminó siendo “trata de personas y explotación laboral”.

Lo triste y lamentable es que este tipo de casos se repiten y se repiten cada fin de semana, en todo el territorio colombiano y en nuestro Departamento. Con mucha frecuencia escucho a muchos padres de familia que me cuentan ilusionados que sus hijos se van a “probar suerte” a Argentina, a Brasil, a Estados Unidos y recientemente uno me comentó acerca de una opción en Uruguay.

Estos tipos (los falsos empresarios) no tienen escrúpulos. Ya se llevan hasta niños de 15 y 16 añitos y aunque las autoridades hacen ingentes esfuerzos para tener control del tema, pueden más las ilusiones y el sueño de llegar a ser James, Falcao o Bacca que los riesgos que se corren por creer estas promesas, que casi siempre resultan falsas.

Conocí hace poco el caso de un padre de familia que hipotecó la casa para que su hijo viajara a Inglaterra. El muchacho fue, gracias a Dios volvió pero no pasó nada, sigue jugando en un equipo juvenil de Bogotá y lo único cierto que hay es la gran deuda.

No puedo llegar al extremo de decir que no hay buenos empresarios, personas que de verdad piensan en los jóvenes jugadores y en sus condiciones; pero la realidad nos muestra que ellos piensan más en el negocio que en otra cosa.

La FIFA y las autoridades del fútbol hacen poco, muy poco. Ahora están más preocupadas de su propio escándalo de corrupción que de otra cosa.

Por eso, hay que tener los ojos bien abiertos, no tragar entero, no dejarse llevar por la ilusión porque no solo está en juego el sueño del jovencito, también la tranquilidad y hasta el futuro de toda una familia.

 

hector santanaPor: Héctor Santana Monsalve
Hectorsantana2004@gmail.com
Director de Deporte Risaraldense

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